Miguel Mederico7.4 K

-¿Te recuerdas cuando nos entramos a golpes?, ja ja ja. Éramos solo unos niños. -Claro que lo recuerdo, fue nuestra primera pelea. -Llega...

Ella y yo solo estamos hablando. Soy un agradable completo desconocido, soy el intruso que fue invitado. Todo lo que ella sabe de mí es q...

Hay cosas invisibles en todas partes, no solo se trata del avión de la Mujer Maravilla, ni del batimóvil del Chico Percebe y Sireno Man (...

Heme aquí, en el mismo sitió, exactamente parado donde suelo detenerme tras hacer mi vida cotidiana, entre mi cama, la computadora y el g...

Cualquier día atravesado, que no sea lunes o primero, me atreveré a comenzar desordenado, sin lógica, sin táctica, sin que me frene no sa...

Podría casi decir que detesto los lugares llenos de gente, pero no me atrevo a hacerlo, porque -de alguna manera- sería negarme a mí mism...

Estaba pescando calmas en la ducha, donde las lágrimas son ambiguas y algunas afecciones se vuelven cargas livianas que se diluyen por el...

Desierto de mis rumbos, desierto que me entierra. Hay turbulencia en este ambiente que habito y la única decisión que tomé fue arriesgarm...

Existen personas que, por ego, ignorancia, flojera, desorganización o fe en nosotros, no pueden ser auxiliadas. Me atrevería a decir que ...

He aprendido a escucharte con el corazón, el sonido de cada pálpito rebota en las paredes de mi mente y va dibujándote como una ecografía...